Ayer me terminé (es decir, llegué a los créditos del final) el juego de Scott Pilgrim. Está basado en un comic del cual han sacado ya la película en Estados Unidos y que yo veré descargada de Internet (teniendo en cuenta que su marketing global ha hecho que quiera verla antes de los 4 meses que va a tardar en llegar aquí).
El videojuego es un 4 jugadores contra el barrio (mejor no jugar solo) del estilo de Street of Rage 2 pero añadiéndole subir de niveles para adquirir habilidades, tremendos líos con cuentas de la consola para poder salvar el estado, incomprensibles (al principio) interfaces de usuario (especialmente en la tienda) y algunos bugs de esos de salirte del escenario y tal.
Qué mal ¿no? Pues no. El juego es AWESOME. Tiene una genial banda sonora de Anamanaguchi y los gráficos hechos por quien todo el mundo estaba deseando que hiciese un juego, Paul Robertson.
Realmente genial. Y además es descargable y cuesta 10 euros. ¡Viva!